Seguí la carrera de Messi desde antes que debutara en Barsa. Creo que es el mejor jugador que yo vi, sin desmerecer a Maradona ni a Pelé, es mi gusto futbolistico. Además es un tipo humilde más allá de su fortuna personal ( a diferencia de Maradona o Cristiano Ronaldo por ejemplo). En Argentina desde siempre desde su debut en la Selección se lo criticó duramente, sobre todo en los medios capitalinos muy ligados a River, Boca, San Lorenzo Racing etc. la mayoría de las veces en forma injusta porque la selección desde 2006 hasta ahora , jamás conformó un equipo al cuál el se pudierea acoplar. Peckerman lo tenía de suplente de Riquelme al igual que Basile en su primer etapa, hasta la copa America de Venezuela. Maradona lo hacia jugar en campo propio practicamete porque prefería a Tevez como nueve acompañado de Higuain (doble nueve ) y aguero.. Batista no conformó ningun grupo fue un desastre (de la copa america jugada en nuestro país Tevez fue queien erró el penal decisivo y no se lo criticó como a Messi) Recién Sabella y Martino le encontraron un funcionamiento al equipo, Pero siempre le faltó un rial pa el peso, el el mundial, DiMaría y Aguero lesionados, al igual que en Chile, en el Mundial (2014) Tambien estuvo lesionado Higuain. Y bueno ahora ( Messi hizo una copa américa brillante independientemente del penal) medio equipo estuvo lesionado en la final y asi y todo merecimos ganarla ante un rival dificilisimo como Chile. (Este chile postbielsa lógico).
Por eso no se si a Messi se le deben pedir tantas responsabilidades (como ser ejemplo para nuestros gurises) pero me gustó esta carta por eso la reproduzco. Bien Johana Fucks.
LA CARTA
COMPLETA DE YOHANA FUCKS PARA MESSI:
Probablemente jamás leas esta carta. Pero la escribo igual, no como
hincha del fútbol sino como docente argentina, esa profesión que elegí y que me
apasiona como a vos la tuya.
Podría escribirte sobre la maravilla de tus talentos para el deporte más
amado de nuestro país, sobre el placer que me moviliza ser una de las
generaciones que pueden verte desplegar la magia en tus botines, sobre la
admiración que despertas en cada uno de los gurises del mundo entero. Pero todo
eso sería repetir frases hechas. Por eso voy a escribirte para que me ayudes en
un reto mucho más complejo de los que hasta ahora enfrentaste, quiero que me
ayudes en la difícil misión de formar las conductas de esos chicos que te ven
como un héroe futbolero y como un ejemplo a seguir.
Por más amor y dedicación que ponga en mi trabajo, jamás tendré de mis
alumnos esa maravillosa fascinación que sienten por alguien como vos. Y hoy
verán a su más grande ídolo rendirse. Te ruego que no les des el gusto a los
mediocres, a esos que frustrados por sus miles de metas no alcanzadas vuelcan
sus rencores en un jugador de fútbol, a esos que opinan de todos los demás
porque hacerlo es fácil y gratuito. Y te lo dice una maestra que con el abismal
espacio que nos separa, lidia con esa liviana costumbre argentina de creer que
el trabajo de otro es sencillo, que meter goles en un arco es tan simple como
construir una casa o formar el futuro de una persona. Esa enferma necesidad de
tocar siempre de oído, de ponernos en jueces insensatos que sentencian con
desprecio y arrogancia el desempeño del otro, poniendo con valor solo las
victorias y desmereciendo los errores como fracasos, esos mismos errores que
nos hacen humanos en continuo aprendizaje.
Por favor no renuncies, no les hagas creer que en este país solo importa
ganar y ser primero. No les muestres que por más éxitos que uno coseche en la
vida, nunca terminará de conformar a los demás y peor aún, no les hagas sentir
que deben vivir para conformar a los otros. No les brindes ese mensaje errado
de que a pesar de tantas adversidades superadas, a pesar de pelearla desde muy
pibe para llegar a ser el hombre triunfador de hoy, a pesar de asumir
responsabilidades desde muy temprana edad y haber luchado hasta con
impedimentos físicos para lograr tus sueños, todo eso se opaca ante las
críticas de los envidiosos que en el fondo solo desean ser como vos.
Si vos que tuviste la familia acompañandote, que tenes un rico
patrimonio personal y el apoyo de tanta gente, no lo logras, ¿como podrían
ellos creerse capaces de continuar adelante pese a tantas batallas que día a
día deben enfrentar?
Yo no les hablo a ellos del Messi que juega maravillosamente al fútbol,
sino del que practicó miles de tiros libres para lograr embocar la pelota en
ese ángulo inalcanzable para cualquier arquero; les hablo del Messi que soportó
siendo un niño como ellos tantas dolorosas agujas para seguir en pie tras lo
que amaba; les hablo del Messi que con todo el dinero que ha ganado ayuda a
otros chicos como ellos en sus diferentes dificultades; les hablo del Messi
hombre, el que formó su familia y lidia todos los días con el rol más
importante que es ser un buen padre; les hablo del Messi que impide que un
fanático que lo sorprende en pleno partido salga de allí lastimado; les hablo
del Messi que puede equivocarse hasta errando un penal porque de fallas estamos
hechas las personas y eso les muestra que hasta el más grande de todos los
tiempos es imperfecto.
No te rindas, no guardes la camiseta con los colores de nuestra Patria
porque al ponertela te convertis en un argentino más que nos representa a
todos, y no todos esperamos medallas y copas para sentirnos maravillosamente
orgullosos de que vos lo seas. No hagas que mis gurises sientan que salir
segundos es una derrota, que el valor de las personas está en cuán llenas esten
sus vitrinas, que perder un partido es perder la gloria.
Mis alumnos necesitan entender que los más nobles héroes, sin importar
si son médicos, soldados, maestros o jugadores de fútbol, son los que brindan
lo mejor de sí mismos para el bienestar de otros, aun sabiendo que nadie los
valorará más por ello, sabiendo que si lo logra, el triunfo es de todos, pero
si falla el fracaso solo será de él, y aun así lo intenta. Pero sobre todo, se
tiene heroísmo y hombría, cuando se lucha y superan las pérdidas con coraje y
entereza, aun con todo el universo diciéndonos que no vamos a lograrlo. Y un
día se encuentran con la mayor de las victorias: ser felices siendo ellos mismos,
sin reclamarse cuántos demonios debieron enfrentar para lograrlo.
Todos hablan de pelotas, yo creo en la fortaleza de tu corazón.